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Impresione a sus invitados con esta ensalada de rúcula, sandía y rábano, apta para personas diabéticas. Esta excelente ensalada de verano presenta sandía dulce con rábanos picantes, cebollas crujientes y un aderezo picante.

Este delicioso pesto de espinaca también puede ser usado como untable sobre los sándwiches o burritos de pavo o pollo. Si no te gusta el fletán, puedes sustituirlo por bacalao o tilapia.

Si estás cansado/a del mismo desayuno aburrido, prueba este complaciente y sabroso burrito. También puedes experimentar con diferentes vegetales en esta receta.

Ligeros y esponjosos, estos pequeños muffins de desayuno están repletos de sabor. Son perfectos para una gran reunión o se pueden congelar y recalentar para un desayuno rápido para llevar.

Esta pasta cremosa de calabaza es una comida reconfortante para personas con diabetes para una fresca noche de otoño. Esta receta rica en fibra es vegetariana, pero puedes intentar agregar una proteína magra como el pollo para obtener más proteínas. Además, ¡las sobras son una comida fácil para el día siguiente!

Puedes servir esto con salsa tzatziki casera. Ralle 1 pepino pequeño y 1 diente de ajo en 1/2 taza de yogur griego natural sin grasa y mezcle para prepararlo.

¡Prueba esta comida sin carne para el desayuno, el almuerzo o la cena!

Fresca y afrutada, esta abundante ensalada de pollo, muy baja en carbohidratos, es un almuerzo fácil para el otoño. ¡Prepárala aún más asando el pollo con anticipación y refrigéralo hasta que estés listo para servir!

Un tazón de desayuno es una buena manera de aprovechar las verduras que te sobran. Este tazón, muy bajo en carbohidratos, realza su sabor con especias, salchicha de pollo, champiñones y huevos. Rocía un poco de jugo de limón por encima para darle un toque picante.