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La ensalada de huevo es una receta súper sencilla y baja en carbohidratos que sabe estupendo por su cuenta, pero también brilla en una cantidad de otras comidas. Perfecta para los sobrantes, también es económica y muy sabrosa, así que adelante y haz una doble tanda para tenerla a disposición. Sirve la ensalada sobre un lecho de vegetales verdes para ensalada, sobre una tostada de grano entero, en unos burritos de tortilla de grano entero, sobre galletas saladas de grano entero, o con hojuelas de tortilla de grano entero como un bocadillo.

Esta receta es increíblemente sencilla: ¡solo hay que poner todo en una cazuela y hornear! También es flexible: puedes sustituirlo por casi cualquier proteína, grano, verdura y queso. ¡Sé creativo! Puedes usar verduras frescas, congeladas o restos de verduras cocidas. En el caso de las verduras frescas o congeladas, descongélalas/cuécelas en el microondas antes de añadirlas a la cazuela. *Asegúrate de utilizar una sopa cremosa lista para comer, no condensada. Si todo lo que tienes es condensado, dilúyelo con leche, caldo o agua antes de añadirlo a la cazuela.

Esta refrescante ensalada de brócoli combina bien con cualquier pollo a la barbacoa, pescado a la parrilla o chuletas de cerdo.

Revisa los ingredientes en las tortillas o burritos sin gluten e intenta encontrar aquellos elaborados con granos enteros.

Esta ensalada es una dínamo de alimentos energéticos y baja en carbohidratos. Fácil de preparar y repleta de buena nutrición (proteínas del pollo, fibra de la manzana y grasas saludables de las nueces), es una receta rápida y apta para diabéticos, perfecta para almuerzos y para preparar con antelación. Llena de sabor y crujiente, ¡no creerás lo fácil que es! Si te sobra pollo, prepara un rollito de ensalada césar de pollo para el almuerzo y tendrás una comida equilibrada.

Haz esta rápida y deliciosa lonchera casera para el primer día de vuelta a clases de tus hijos. Será un banquete para ellos y sabrás que estarán comiendo sano. ¡También puedes hacer una para ti!

Esta sopa de frijoles toscana fue una de las primeras sopas que Robyn Webb aprendió en una clase de cocina en una granja de Italia. La simplificó utilizando frijoles enlatados (la receta original pide que se utilicen frijoles secos), que funcionan perfectamente bien. Es similar a la sopa minestrone, pero sin la pasta. Asegúrate de añadir el vinagre balsámico, ya que realza el sabor de las verduras y hace que los garbanzos tengan un sabor aún más rico.