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¡Siempre es más divertido comer alimentos de las brochetas! Este bocadillo bajo en carbohidratos acumula proteína, lácteos, y vegetales en una brocheta pequeña o palillo. Hazlas con un día o dos de anticipación, para que puedas tomarlas rápidamente y disfrutarlas cuando estés en la calle. Encuentra esta receta y más en el Libro de cocina Crea tu Plato para la Diabetes , por Toby Amidor, MS, RD, CDN, FAND

Combina estas deliciosas hamburguesas de pavo con un acompañamiento de vegetales sin almidón como brócoli al vapor.

La col rizada se ha convertido en un superalimento popular porque está repleta de vitamina A, vitamina C, potasio y fibra. Además, es baja en carbohidratos, por lo que no eleva demasiado los niveles de azúcar en sangre. Si tienes prisa, puedes comprar la col rizada ya picada en bolsas en la mayoría de las tiendas de comestibles.

Este emparedado súper sencillo tiene mucho sabor gracias a la ensalada de col y la salsa. Es perfecto para un almuerzo ligero. Utiliza las sobras de pavo del Día de Acción de Gracias para una versión más ligera del tradicional emparedado de pavo.

La tostada de aguacate es un desayuno para llevar fácil y rápido que incorpora grasa saludable, granos enteros, y proteína. Cambia las cosas sustituyendo el tocino de pavo con un huevo frito sencillo o un huevo cocido entero rebanado. Completa tu Plato: Para un desayuno suculento y complaciente, añade 1/2 taza de yogur griego plano sin grasa cubierto con un puñado de moras azules.

La ensalada Caprese es una sencilla ensalada mediterránea hecha con tomates, mozzarella fresca y albahaca. Aquí combinamos estos sabores en una hamburguesa para que se te haga la boca agua.

Este puede ser el chili de una olla más sencillo del mundo, y como todo buen chili, es muy versátil. Puedes comerlo sin más nada, servirlo encima de una batata horneada, o esparce un poco a lo largo de hojuelas de tortilla de grano entero con un rocío de queso, lechuga desmenuzada, y guacamole para unos nachos saludables. Si deseas abultar la receta y llenarla de fibra, añade algunos frijoles cocidos o un grano cocido (arroz integral, quinoa, o lo que sea que pudieras tener en la despensa funciona genial). ¡Y no dudes experimentar con salsa picante, especias adicionales, o pimientos picados

Estas albóndigas súper sencillas reciben un impulso de sabor gracias a la salsa marinara de bote y al pesto. Puedes servirlas sobre una cama de fideos de calabacín ("zoodles") o espaguetis integrales. O bien, sin fideos y con una ensalada de hojas verdes como acompañamiento. Encuentra esta receta y otras más en El libro de cocina sencilla y limpia para la diabetes de Jackie Newgent, RDN, CDN