Beneficios del consumo de frutas y verduras frescas y congeladas

por Caron Golden
Benefits of Frozen Fruits and Vegetables
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Dependiendo de dónde viva, es posible que no siempre tenga acceso a productos frescos. Incluso si encuentra sus frutas y verduras frescas favoritas en la tienda, puede que sean más caras durante su temporada baja. Por esta y muchas más razones, debería aprovechar los productos congelados.
Hay muchas buenas razones para comer frutas y verduras sin almidón, sobre todo si se es diabético. Aportan nutrientes, mejoran los niveles de glucosa en sangre (azúcar en sangre), reducen la presión sanguínea y ayudan a controlar el peso. Debe esforzarse por consumir tantos productos como pueda durante todo el año.

Por qué debe consumir productos congelados

  • Mayor variedad

  • Si aprovecha las ventajas de los productos congelados, dispondrá de una mayor variedad de opciones que en la sección de productos frescos. Le abre la puerta a un sinfín de comidas sanas y deliciosas que puede preparar.
  • Pico de madurez

  • Los productos congelados se recogen en su punto óptimo de maduración, y su valor nutritivo se mantiene intacto al congelarlos. Eso significa que obtendrá los mismos beneficios nutricionales de vitaminas y minerales en sus alimentos que si comiera frutas y verduras frescas.
  • Menos desperdicio de alimentos

  • Los productos congelados generan menos residuos. Si le apetece un batido de frutas de verano, puede sacar del congelador la cantidad de fruta que necesite y guardar las sobras sin preocuparse de que se estropeen.

Puede hacer lo mismo si agrega espinacas a un plato de pollo al horno, prepara sopa con brócoli u hornea magdalenas de arándanos. Si es de los que tienden a dejar pasar los productos frescos hasta que se estropean, las frutas y verduras congeladas pueden ser la mejor opción para usted.

Cuando los productos frescos son la mejor opción

Aunque los productos congelados son una opción excelente por su mayor variedad, grado de madurez y reducción del desperdicio alimentario, hay algunas situaciones en las que los productos frescos son la mejor opción.
 
Por ejemplo, elija productos frescos cuando vaya a consumirlos solos (como un tazón de fresas) o como parte de un plato más grande (como espinacas en un emparedado). Al descongelar los productos congelados, su textura y nivel de humedad cambian y pueden resultar desagradables para el consumo.
 
Sin embargo, el cambio de textura no afecta el sabor del plato cuando el producto se cocina o se mezcla. En esas situaciones, el congelado es tan bueno como el fresco.

Cómo hacer sus propias frutas y verduras congeladas

Si hace poco compró en el supermercado un montón de frutas y verduras frescas que le encantan o las ha cultivado en su jardín (como bayas, piñas o calabacines) y no quiere que se estropeen, ¡puede congelarlas usted mismo! Basta con cortar en rodajas o cubos los productos (excepto las bayas), colocarlos planos sobre una bandeja y congelarlos.
 
Métalos en una bolsa de congelación y márquela con el nombre del ingrediente y la fecha (la mayoría de los productos congelados duran entre ocho meses y un año en el congelador). ¡Ahora tiene sus propios productos congelados para disfrutarlos cuando quiera!

No importa con qué frutas y verduras decida llenar su congelador, asegúrese de suscribirte al boletín electrónico de Latinx para obtener ideas e inspiración sobre cómo utilizarlas en nuevas recetas.