La sandía es una de las frutas más populares del mundo, y con razón. No solo es deliciosa y refrescante, sino que además está repleta de nutrientes beneficiosos para la salud. Ya sea para disfrutar de una rebanada en una parrillada de verano o para agregarla a una ensalada de frutas, la sandía es el complemento perfecto para cualquier comida.
Por qué la sandía es buena para la salud
La sandía es una gran fuente de vitaminas A y C, ambas importantes para mantener la piel sana y la función inmunitaria. También contiene licopeno, un potente antioxidante que ha demostrado reducir el riesgo de cáncer y enfermedades cardiacas. Además, es baja en calorías, lo que puede ayudar a controlar el peso. Una taza de sandía en dados contiene aproximadamente 11 gramos de carbohidratos, la mayoría de los cuales proceden del azúcar natural. Sin embargo, el contenido total de carbohidratos de la sandía es relativamente bajo, lo que la convierte en una gran opción para las personas diabéticas.
Cómo elegir una sandía madura
Elegir la sandía perfecta puede ser un desafío, pero hay algunas cosas en las que se puede fijar para asegurarse de que la que va a comprar está madura y es dulce. En primer lugar, busque una sandía simétrica y sin golpes ni magulladuras. Debe parecer pesada para su tamaño, y la parte inferior debe tener una mancha amarilla cremosa que indica que ha madurado en el suelo. Por último, dé un golpecito a la sandía: si suena hueca, es probable que esté madura.
Cómo conservar la sandía
Una vez que haya traído la sandía a casa, es importante conservarla adecuadamente para que se mantenga fresca y jugosa. Las sandías enteras pueden conservarse a temperatura ambiente hasta una semana, pero una vez cortadas deben refrigerarse y consumirse en pocos días.
Cortar una puede parecer intimidante, pero en realidad es fácil. Empiece por cortar los extremos de la sandía para que pueda mantenerse erguida. A continuación, córtela por la mitad a lo largo. A partir de ahí, puede cortarla en gajos o en dados, según prefiera.
Formas creativas de comer sandía
Hay muchas maneras de disfrutar de la sandía, lo que la convierte en una fruta versátil que puede agregar a una gran variedad de platos. Aquí le ofrecemos algunas ideas para empezar:
- Córtela en dados y mézclela con queso feta y menta fresca para preparar una refrescante ensalada de verano.
- Mézclela con hielo para preparar un delicioso raspado de sandía.
- Ase rodajas de sandía para darle un toque único a una clásica parrillada de verano.
- Prepare salsa de sandía combinando sandía cortada en dados, cebolla roja, chile jalapeño, jugo de limón y cilantro.
La sandía no solo es deliciosa, sino también increíblemente nutritiva. Por su alto contenido de agua y su bajo aporte calórico, es el refrigerio dulce perfecto para las personas diabéticas. Suscríbase hoy mismo al boletín electrónico Diabetes Food Hub® para recibir cada mes más recetas recomendadas para personas diabéticas.
